|
ESCUCHA EL POST
|
La masturbación es un tema que todavía cuesta hablar. Me acuerdo estar en una reunión de mujeres y sacar el tema. Unas reían , otras tomaban el vino con nerviosismo y otras simplemente se levantaban al baño.
¿Se puede tener sexo y ser eco? Es decir, preocuparnos por el medio ambiente y ser consumidores responsables.
En la industria de los juguetes sexuales se consumen grandísimas cantidades de pilas y plástico, insumos que luego no se reciclan. Los vibradores incluyen baterías, cables, látex, metal, plásticos, silicona y otras piezas que no se pueden lanzar así como así a la bolsa de basura de cualquier cocina.
Uno de los mayores impactos ambientales de la industria de los juguetes sexuales es el uso de materiales no reciclables, como plásticos y metales. A menudo, estos materiales se utilizan para crear vibradores y otros juguetes sexuales que tienen una vida útil corta y, cuando se desechan, pueden tardar años en descomponerse. Además, muchos de estos productos contienen baterías y otros componentes electrónicos que son difíciles de reciclar o desechar de manera segura.
Afortunadamente, hay alternativas eco-amigables disponibles en el mercado. Algunos fabricantes están comenzando a producir juguetes sexuales con materiales reciclados y biodegradables, como el caucho natural, la madera y el vidrio. Estos materiales no solo son más sostenibles, sino que también pueden proporcionar una experiencia sexual más saludable y natural.
Otra opción es utilizar juguetes sexuales recargables. Estos dispositivos suelen tener una vida útil más larga que los que funcionan con pilas, lo que reduce la cantidad de residuos que generamos. Además, los juguetes sexuales recargables suelen ser más silenciosos y potentes que los que funcionan con pilas, lo que los convierte en una opción atractiva para aquellos que buscan una experiencia más discreta.
¿Qué ocurre con estos y lujuriosos aparatos cuando dejan de funcionar? ¿Qué hacemos con ese vibrador que ya no vibra porque, aunque parezca mentira viniendo de donde viene, ha pasado a mejor vida? ¿Lo tiramos a la basura como un vulgar residuo más o somos buenos ciudadanos e intentamos mantener limpio nuestro ecosistema y que no perjudique al medio ambiente una vez que la obsolescencia programada acabe con su existencia como gran masturbador?