Tanto los codos como las rodillas necesitan de cuidados específicos ya que tienden a volverse rugosos y resecos a causa de los cambios de temperaturas, la falta de humedad y el roce de la ropa. Todo es cuestión de estética en los brazos y piernas y se hace necesario cuidarlos de una forma especial, aunque no parezca.
Recetas fáciles y naturales
- Mezcla una cucharadita de miel, 15 gotas de jugo de limón y una cucharada de aceite de oliva y aplícalo en los codos y en las rodillas solamente cuando los notes más ásperos que lo normal.
- Con 100 gramos de pepino rallado y 50 gramos de leche descremada puedes conseguir una loción que tu piel agradecerá mucho.
- Un baño con agua caliente ayuda a que la piel de ambas zonas se reblandezca y cueste menos tratarla.