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Manifesto de una chica natural,orgánica y latina

Me cuesta mucho ser una coach de esas que tiene una vida perfecta.

Las veo todo el tiempo por Instagram y me pongo histérica.

Se levantan a las 6 de la mañana, ejercitan mas de 60 sentadillas que previamente han grabado para salir ” naturalmente ” en un videíto de Instagram mientras citan mas de 20 hashtag y siempre , siempre enseñan sus abdominales como cuadritos de chocolate, en una perfecta pose sin un mínimo de celulitis, o un poquito de gordura o una gota de sudor que les corra por la frente como cualquier humano. No , ellas , perfectas, siempre tienen las tetas duras, los cuadriceps duros, las pestañas duras, el ánimo duro , la voz dura y por supuesto el culo duro,   disculpando mi francés.

Después te enseñan que siempre, pero siempre , “comen” bien . Una foto de una arepa hecha con algún ingrediente atómico que parece ser mas saludable, o una pechuga de pollo sin color alguno , asco, o un smoothei, porque ahora todas son bilingues  y mas gringas que yo, así que no es batido , ni jugo , ni merengada, sino smoothei. Ellas son, las reinas del smoothei.

También son “gurus de vida” porque siempre acompañan las fotos con las benditas resoluciones de año nuevo y te bautizan diariamente con la “palabra” .

“Se fuerte”. “Tu puedes”. “La vida es así” “Yes you can ” .

Yo , Laura Termini , ciudadana de este país me declaro en desobediencia absoluta a las resoluciones de estas mujeres de cuerpo perfecto, horario inventado y caderas dormidas.

Porque después de tanta repetición de tanta mentira , deben quedar cansadísimas.

NO A LA RESOLUCION.

Me pone nerviosa. Prefiero SOLUCIONES de vida. Porque la resolución es temporal , se me va rapidito de las manos y como arena se me escurre mientras mas trato de agarrarla.

Cuando escribo te quiero dar las herramientas diarias, para que siguiendo con nuestra tradición de “Seres Humanos” tengamos una vida feliz, balanceada, llena de vida, de vegetales , de chocolate, de helado de vainilla, de un vinito con abrazo de amigo , de una llorada por un buen orgasmo, de una palmada amiga si estamos tristes, de un grito de “muévete” o “cuidado estas comiendo mucho” cuando lo necesitamos.

No necesito gente perfecta. Para eso me alquilo tres horas de películas futuristas con robots que me atienden y me hacen la limpieza, mi deseo de toda una vida esperando reencarnar de aquí a 100 años y que existan, por cierto.

No , no hay resolución.  Todo con moderación . De a poquito como es bueno , para saborear los momentos y SER FELICES DE UNA VEZ POR TODAS.