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Si hay un tema que está en boca de todos es la salud mental, y no es para menos, se trata de un factor que regula qué piensas, sientes y haces. Básicamente, toda tu felicidad y productividad están ancladas a esta realidad, por lo que conviene darle atención.
Sin embargo, una cosa es emplear el término, y otra muy diferente es ser consiente del impacto que podría tener en tu vida. A continuación te hablo un poco acerca de cómo puedes prevenir el desbalance emocional e impulsarte cognitivamente.
Hay muchas maneras de cuidar la salud mental, pero lo primero que debes entender es que el organismo no funciona de manera aislada. Por lo tanto, todo lo que dices, lees, hablas, comes y meditas contribuye a ese equilibrio, que a veces es tan difícil de lograr.
No obstante, hay conductas que permiten una mejor respuesta orgánica. Los siguientes hábitos y costumbres le darán un ajuste sano a tu cotidianidad:
1- No abandonar la salud física
Tu cerebro produce diversas hormonas que determinan tus emociones, y estas están condicionadas a las actividades que vas realizando en el día a día. El ejercicio es una de ellas, pues libera endorfinas, haciéndote sentir automáticamente más feliz, confiada y dinámica.
Lo ideal es organizar una rutina que puedas ejecutar regularmente. Unos 30 minutos de ejercicio cardiovascular intenso te ayudará a lidiar con el estrés, y además mantendrá tu figura esbelta.
2- Practicar meditación
No todo se resume a un cuerpo sano, tener las emociones bajo control puede ser un reto cuando no tienes orden en los pensamientos que generas. Para ello, lo más recomendable es practicar sesiones de meditación, donde puedas relajarte y recuperar la positividad desde un enfoque personal.
3- Cuida el horario de sueño
Nadie que no duerma apropiadamente puede estar sano, es durante estas 8 horas sagradas cuando el cerebro realiza procesos básicos para el funcionamiento del organismo.
Cuando no duermes, obligas a tu sistema a trabajar sin combustible. Procura no caer en un hábito tan dañino.
4- Consulta al médico si es necesario
Reconocer que algo no va bien también es cuidarse, si notas que hay un problema con tus emociones, o crees que padeces depresión o ansiedad, tal vez sea hora de acudir con un especialista. Los trastornos se pueden prevenir, solo hay que trabajar para lograr efectos positivos.